Bueeeno a veces se me hace difícil asumir el paso del tiempo. Mi ojos perciben el cambio en los demás, yo no me veo. Solo de vez en cuando un reflejo en un espejo. Pero esa no soy realmente yo.
Nunca me voy a lograr ver como me ven los demás. Me siento, siento mi corazón latir, me toco, siento mi textura, mi temperatura, cómo fluye todo por dentro.
Y me caigo bien, me quiero. Estoy conforme conmigo misma.... de mi.
Creo que es por eso que jamás le voy a perdonar a la vida que me tenga que morir un día.
Sencillamente no me quiero ir, se me congela el alma de tan solo sentirlo. Cuando se me cruza la imagen por la mente, primero me da terror, luego me da una pena tremenda, después me da rabia y luego....nada, un vacio enorme y el consuelo de que estoy respirando aún.
Soy una agradecida de tener conciencia de mi misma, de mi propia existencia.
Soy feliz de ser mujer, soy feliz de poder amar.
Eso solo eso, creo que en esta semana me he puesto más reflexiva que de costumbre. Tal vez nostalgia con una pizca de pena.
He sido tan feliz en este tiempo que de vez en cuando extraño llorar.