viernes, 27 de agosto de 2010

Heroínas

Me gustan esas historias donde la protagonista se salva sola. Donde a pesar de la amenaza que atenta contra su vida... ésta no la "amilana". Donde en la soledad del peligro no duda de las acciones a realizar.

Me gustan esas historias donde la protagonista siente miedo, pero tiene fe en si misma, aunque no lo tiene claro.

¿Y porqué me gustan esas protagonistas?

Porque cuando lloran, nadie se entera.
Porque se sienten cómodas en su soledad.
Porque no le temen a la oscuridad, ni a dormir a solas.
Porque matan la araña aunque les dé pánico.
Porque si no cambian la ampolleta quemada no es porque no sepan... es porque les da flojera.
Porque en la comodidad de su ser eligen con quien ser vulnerables.
Porque aunque hayan perdido, creen que lo pueden revertir.
Porque sufren, pero no se amargan.
Porque saben cuando guardar silencio.
Porque les carga el drama, pero siempre saben qué decir.
Porque están cómodas consigo mismas.
Porque en su carazón no hay lugar para el rencor.
Porque nunca buscan agradar a nadie, ni dar en el gusto.
Porque jamás piensan que lo saben todo.
Porque nunca se quejan.
Porque no le temen a la muerte.

Ahhhh cuanto me gustaría ser una de esas Heroínas.

Dije que porque se salvan solas? Siiiiii se salvan solas. No se sientan a esperar el rescate. No arrancan de la ola...la enfrentan!

Me gustan esas historias que hablan de mujeres valientes y que están en extinción.

Salud!

miércoles, 4 de agosto de 2010

Cleo Patra


Hace 2 años atrás mi vida era distinta. Era igualmente feliz, estaba con el mismo horroroso peso y mi ojos brillaron cuando a los sobrinos de la Su les regalaron unas jaulas con unos Hamsters Chinos (eso creo), dentro. Me encantaron! su pequeñez, su sencillez, su pelaje. Algo ariscos y mordían cuando los trataban de acariciar.

A los días después, mi Su llegó a la casa de su mamá (donde vivíamos), con una jaula con un hamster.... para MI!

Me llené de alegría. Le enseñé a ser mansa, a comer de mis dedos, a quedarse dormida en mi mano.

Me encantaba sentir su corazón latir en la palma de mi mano. Tanta energía en un cuerpo tan compacto y pequeño.

Me sorprendió cuando traté de presentarle una "amiguis" que quiso atacar a primera vista. Como la amiguis la teníamos de visita permanente, las tuvimos que alejar. Hasta que un día la visita amaneció fallecida. Nunca supimos si fue un martillazo que yo dí en altas horas de la noche... o si fue la Cleo que contrató algún zancudo sicario.

Conmigo era un amor. Le compré una bola transparente para que corriera. Pero erré el tamaño...no importa, la disfrutó año y medio, hasta que se le hizo muy pesada y le traje una de su tamaño.

Nos acompañó en nuestra travesía ... comenzar a vivir juntas en un departamento solo para nosotras.
Cuando por viaje íbamos a estar fuera de casa más de 3 días, se quedaba con mi suegra (excepto la última vez que teníamos una voluntaria para cuidarla en su propia casa). Se cayó 3 veces desde una altura de 100 cm... y pasó ilesa.

A parte de sus semillitas y bolas de proteínas, comió zanahorias, manzanas, lechuga, escarola, maní, almendras, nueces, pasas, yogurt, queso edam, mantecoso, aceite pepita de uva.

Se enfermó gravemente una vez. Le cortaron los dientes una vez. Nunca se cruzó con un macho ni tuvo hijos. Una vez gritó y nunca supimos porqué.

Nos vio llegar enMadonizadas del concierto.

Sobrevivió a un terremoto de 8,3 grados, a los 15 minutos salió de su casa para comer.

Bueno, y hoy por la mañana camino a prender el calefont, pasé por su jaulita para rellenarle el comedero con semillitas. Silencio absoluto. Desarmé completa su jaula y abrí el techo de su casa...nada, no se movía. Pensé que era como hace medio año atrás cuando pensé que había muerto, pero al tocarla pegó un tremendo salto chillando al mismo tiempo.. como diciendo "chucha! me asustaste estúpida!!!"... Solo que esta vez la toqué y estaba helada y tiesa. Rigor mortis. Se había ido, ya no estaban esos ojitos de perla negra brillante.

La puse en una cajita de cartón y esta en una bolsa Ziploc, pensé en enterrarla en el antejardín de mi trabajo, pero luego lo descarté.

Trabajé todo el día con ella en la cartera. Atravesé Santiago ida y vuelta... pero no encontré jamás un lugar excelente para dejar su cuerpo.

Al final del día fuimos a dar con la Su al depto de su hermana. Un edificio en Las Condes, de catorce pisos que en su entrada tiene a un costado un hermoso Alcornoque que fue respetado cuando lo construyeron. Un tremendo Alcornoque, imponente, respetuoso, sencillo, silencioso. Un lugar ideal para descansar un corazón que era capaz de latir a 180 por minuto.

Me conseguí una palita de jardinería y camuflada en la oscuridad y me escabullí entre los matorrales para llegar a la base. Con pala en mano derecha y Cleo en mano izquierda me puse a cavar. En menos de un minuto siento una voz de señora odiosamente cuica: "disculpe... disculpe... qué está haciendo usted?". Chucha! pensé, ni siquiera pedí permiso para enterrar a un roedor. Le mentí con mi mejor sonrisa, imitando su tono "estoy recogiendo muestras de raíz de Alcornoque".... y ahí se generó la conversación más inútil y estúpida de la tierra!! que pasó por tener que decir mi título, enseñar las características del Alconroque, comentar el diseño de jardinería de las áreas verdes del edificio y la promesa de hablar con el jardinero para expresarle mi propuesta para realizar cambios... Todo eso con una pala en una mano y la Cleo en la otra. Por fin me dijo " la dejo tomar la muestra, soy Constanza del quinto piso" a lo que contesté "Rocío del tercero...hasta luego".

Terminé mi labor con una sonrisa en el corazón. Ahí la dejé, a tan solo una cuarta de profundidad, en una tierra mullida y de perfecta filtración... baja densidad aparente y de un pH bastante cercano al neutro. Casi pegada al tronco, junto con las tres lombrices que maté sin querer con la pala, algo así como sepultaban a los faraones... acompañados...

...No en vano se llamó Cleo Patra.


Q.D.E.P.

01 Junio 2008 (app)-03 de Agosto 2010